domingo, 6 de julio de 2008

Hexagrama 19 ♠ La Llegada

19



Lin: el progreso


Hexagrama 1Arriba K'un, lo receptivo, la Tierra

Hexagrama 1Debajo Tui, lo sereno, el lago

Solución general: Este signo corresponde a la época en la que después del solsticio la fuerza luminosa del sol comienza a crecer, (enero-febrero). Es por lo tanto un signo que simboliza el crecimiento de las energías favorables.
Se exige una labor resuelta y capaz de aprovechar plenamente los favores del tiempo. Los buenos tiempos se deben aprovechar al máximo, pues no duran siempre. Todo cambia y la primavera no dura siempre. Así al cabo de un tiempo vendrá el otoño, la decadencia. Esto debe aprovecharse para meditar acerca de los cambios, y para prepararse para cuando llegue el tiempo de decadencia. Quien es capaz de ver por adelantado la llegada de las fuerzas negativas y las afronta nada más aparecer, llegará a dominarlas, pues en el momento son pequeñas y débiles pero si se las deja crecer adquirirán tanta fuerza que será imposible dominarlas.


Mutaciones
(se leen de abajo arriba)

Mutación de la línea 1:

El bien comienza a imponerse, y es bien recibido en los lugares influyentes. No hay que dejarse llevar por la corriente, sino permanecer con perseverancia en el camino recto, pues esto aportará felicidad.

Mutación de la línea 2:

El porvenir no ha de causar ninguna preocupación. Todo es favorable. Por lo tanto uno recorrerá con prontitud, rectitud y audacia los caminos de la vida.

Mutación de la línea 3:

Las cosas van bien, sin embargo no hay que confiarse. Quien se confía corre el peligro de caer en la negligencia y la pasividad, en las posturas cómodas. Si hemos caído en esta actitud podemos poner remedio si asumimos la responsabilidad.


Mutación de la línea 4:

Estamos en una posición superior. En esta posición la actitud correcta consiste en acercarse a los hombres capaces sin ningún tipo de prejuicio.

Mutación de la línea 5:

Quien ocupe una situación elevada debe saber atraerse con sabiduría a personas aptas. La sabiduría no consiste tanto en saber escoger a las personas adecuadas, sino en dejarlas hacer, en dejarlas desarrollar todos sus potenciales sin interferir personalmente en sus asuntos.

Mutación de la línea 6:

La actitud correcta consiste en ayudar a los demás, enseñar a los demás, aunque ello implique rebajarse a uno mismo.

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